LA MADRE QUE NOS PARIO.

El cielo vacío de de tierras y soles,
la calma reinaba, la nada era nada.

La explosión, la madre 
que todo lo aviva,
creo en un instante
la casa que abita.

Nos puso en la mesa 
las frutas y flores,
creyéndose ilesa
de hombres mayores.

Nos dio ríos y mares 
con el agua pura,
empujando el sol 
a la buena altura.

Cálidas mañanas 
pintadas de azul
y las savias plantas.
que curan el blus.

Estamos enfermos
de droga adicción,
de el ansia de infiernos
en vez del amor.

Como el hijo joven
que cae en la cuneta,
repleta de trampas 
que otros les tiendan.

Vende los ajuares 
de padre y madre,
en tantos lugares
manchados de sangre.

Así como nosotros
pillamos la tierra,
sembramos veneno
y la mala hierba.

Salgamos de las cavernas,
sanemos la mente
amando la tierra. 

                                              Migueliux.







 

DESBARIO DE IDEAS.

Encauzado al desbario
por ideas en su mente,
no lo dejan ni pensar,
una y otra, más urgente.

Quieres estar un rato
con una de ellas jugando,
cuando llega a todo trapo 
la próxima y empujando.

No me quiero acostumbrar
por muy brillantes que sean,
a correr siempre detrás
y cuando llego se van..

Voy a llamar el que habita
entre el corazón y el pecho,
el niño que aun se agita
cuando la idea es veneno.

Con sus risas de zagal
me sacara de este tedio
y me enseñara a plantar,
mis ideas en su huerto.

                                                  Migueliux.

NO TE VEO.

Andando por los bancales
de la vida que te apremia,
desojando bellas flores
para adornar tus poemas.

No te veo al abrigo
de que pagues la condena,
que se deleita mezclando
tus pensamientos en pena.

Todavía no as volado 
con las alas del exilio,
entre vientos de inocencia
y remolinos de trigos.

No as pagado el peaje,
tea podido más el sueño,
de estar parado en tu viaje.

                                             Migueliux.

AL PROXENETA Y POLIXENETA

Les prometí a los proxenetas
dedicarles un escrito,
a ellos yo me dirijo.

Antes vuestro radio de acción, se limitaba a las estaciones de trenes, 
esperando que llegara la chica de provincias, buscando como salir de la miseria.

las que pasaran el filtro, vosotros sabíais que con su juventud y ganas de vivir,
las encontraríais en las discotecas o cines donde esperaban encontrar al galán 
que soñaran tantas veces en sus habitaciones blancas, con olor a cal y esperanza.

Sin saberlo mancillasteis vuestra mitad y cuando despertéis de la infamia, os sentiréis
solos al interior de vuestras habitaciones negras, con olor al excremento que  os ha alimentado.

No os perdonaré nunca, no haber tenido el coraje de enseñar a vuestros hijos 
que este no era el camino. Y hoy ejercen de polixenetas, alargando vuestro reinado en el tiempo.

Pero el tiempo se os acabo, la provinciana virgen ya no existe, la desfloraron en alcoba del gran hermano.
Ahora su sueño es vivir sin luz al exterior pero encendida como nunca en su interior. Y tu polixeneta ahi
te pierdes, tu solo conoces la indigente sombra que proyecta el sol de tu ego.

Olvida tus inútiles vienes que solo te llevaran a emborracharte para olvidar que los tienes.
Entra en la casa vestida de cal, ahuyenta la vida, desafinada, banal.
Y ben con tu pueblo, indulto teda.  
    
                                                         Miguel.